martes, 17 de julio de 2012

PROtestas


Los roñosos (en este caso, nunca expresada de modo más precisa la palabra) trabajadores del CEAMSE han tomado una medida terrorista que nos afecta a todos los ciudadanos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires; aunque parezca mentira, en el siglo XXI, y con la situación que nos toca vivir en esta crisis económica internacional, hicieron ¡PARO! ¡DESCARADOS! 

¡Paro, con todos los trastornos que eso implica! 

Evidentemente, es una acción individualista que, en un país nacional y popular, no debe volver a ocurrir. Y la medida es individualista porque con ella los “terror boys” del CEAMSE demuestran solo piensan en sí mismos; en llegar a fin de mes, en poder comprar algo de carne, algo de verdura, algo de yerba,  algo de productos de limpieza, en definitiva, en poder comprar algo. Pero no piensan en nosotros, que tenemos que ver una bolsa de basura en la puerta de nuestro lujoso caserón de Luis María Campos o los perjuicios que eso puede traer a la facturación de nuestro Apart Hotel, lo que desvela a Mauri.

Por suerte, Mauri, ya pensó en nuestro futuro, tomó el toro por las astas en esta difícil situación y, a través de su fiel asistente Sanitlli (cuales Batman y Alfred o el Zorro y Bernardo) diseñaron un plan de socorro. Primero, decretaron la conciliación obligatoria, y la negociación con los cráneos de la UCEP armas en mano.

Segundo, nos pidieron a los porteños que… ¡no saquemos la basura a la calle! ¡Claro, cómo no se nos había ocurrido! Si hay problemas salariales con los recolectores, la solución es no sacar la basura a la calle.
En ese orden, trascendieron las nuevas medidas que Mauri estaría por anunciar para resolver todos nuestros problemas, con su capacidad de administrador más que probada:
-Dado que Metrovías decidió sacar veinte coches por falta de inversión en mantenimiento, Mauri pidió que por favor no tomemos subtes en horario pico, o sea, cuando necesitamos tomarlos.
-Teniendo en cuenta que se han derrumbado algunos edificios antiguos por la construcción de monumentales masas de cemento para la especulación financiera inmobiliaria, Mauri nos pidió que no pasemos por debajo de edificios de más de 40 años si están construyendo una torre al lado.
-Finalmente, visto que en CABA llueven dos gotas y nos llega el agua al cuello, Maruri le pide a Dios que a la lluvia no le seamos indiferentes y corte el chorro, dándonos días de sol los 365 días del año.


Pronto se conocerán más medidas para hacerle a los porteños la vida más confortable.-